Por la peana se adora -o se besa- al santo.
La mucha miel, empalaga.
Por mucho dulzor, no es mejor.
Nadie lamiendo engorda.
Lamiendo no engorda ningún perro.
Por la madre se besa al infante.
En la medida en que se respeta el derecho internacional, éste nos proporciona estabilidad y orden y un medio para predecir el comportamiento de aquellos con los que tenemos obligaciones legales recíprocas.