Manos beso cada día que ver cortadas querría.
La mucha miel, empalaga.
Por mucho dulzor, no es mejor.
Nadie lamiendo engorda.
Lamiendo no engorda ningún perro.
Por la peana se adora -o se besa- al santo.
La mayoría de la gente nunca ha aprendido que uno de los principales objetivos de la vida es disfrutarla.