Quien me hace fiesta, que no me suele hacer, o él me ha engañado o engañarme quiere.
La mucha miel, empalaga.
Por mucho dulzor, no es mejor.
Nadie lamiendo engorda.
Lamiendo no engorda ningún perro.
Por la peana se adora -o se besa- al santo.
Por supuesto que los líderes del Tercer Mundo lo adoran. Atribuyendo los males del Tercer Mundo a los pecados del Primer Mundo los absuelves de la culpa de que sus países no avancen.